Mayo de 1944
Cuando estuvo en la tierra hace dos mil años Cristo dijo, “No vine a traer paz, sino una espada”. La espada del espíritu es esgrimida por la Jerarquía y, por medio de ella, el mal cósmico es detenido; la espada de discriminación es esgrimida por los iniciados y los discípulos del mundo, y por medio de ella la distinción entre el bien y el mal, con una consecuente presentación de libre elección entre los dos, ha sido expuesta ante la humanidad, y las líneas de demarcación han quedado meridianamente claras en esta guerra mundial. Había sido la esperanza del Cristo y el anhelo de todos los Maestros que los hombres vieran con claridad e hicieran una libre y correcta elección para que —sin estado bélico en el plano físico— ellos ocasionaran los cambios necesarios y la finalización de condiciones erróneas. Pero el conflicto descendió al plano físico y la espada de guerra material (hablando simbólicamente) fue empuñada por la humanidad.
No olviden (particularmente aquellos de ustedes que están indignados por el conflicto físico debido a sus inclinaciones pacifistas) que, en Occidente, fue Alemania la que primero de todo tomó la espada en sus manos, marchando sobre Polonia y llevando miseria, devastación y crueldad a una nación más pequeña y mucho más débil, obligando así a Francia y a Gran Bretaña a cumplir sus compromisos con esa pequeña nación y a declarar la guerra al agresor. Fue Japón quien llevó guerra al hemisferio oriental. A las Fuerzas de la Luz no les quedó alternativa alguna excepto luchar en defensa de la libertad.
Antes de la guerra, la Jerarquía hizo lo que pudo para cambiar la tendencia del vivir y del pensar humanos, despertando las conciencias de los inteligentes, estimulando la actividad de los humanitarios e impresionando las mentes de Sus discípulos a fin de suscitar buena voluntad, un impelente deseo de rectas relaciones humanas y condiciones pacíficas. Pero el movimiento no fue suficientemente fuerte; la espada apareció sobre la tierra y el género humano fue sumido en la guerra. Desde entonces el trabajo de impresionar las mentes de los discípulos mundiales y de aquellos a quienes puedan influir, ha sido en las líneas de clarificar los asuntos, poner de manifiesto eso por lo que luchamos, e incitar a hombres y mujeres a emprender una acción que, de una vez por todas, termine con la posibilidad de un cataclismo mundial similar.
Hoy la Jerarquía está enfrentando una actividad culminante. Desde la Luna Llena de Mayo, 1944, hasta la Luna Llena de Mayo, 1945, los Miembros de la Jerarquía unidamente estarán desplegando Su máximo esfuerzo para cerrar la puerta a las Fuerzas del Mal, dirigir la energía de Shamballa (liberada hoy sobre el mundo) a fin de que su aspecto destructivo puedaser trasmutado o dirigido hacia la estimulación que resultará en la reedificación del mundo. Esto entonces afectará no sólo a los Miembros de la Jerarquía, sino a todos aquellos en la Tierra que responden a impresión jerárquica. Tengan presente la siguiente declaración:
El trabajo enfocado y concentrado de la Jerarquía en el momento de la Luna Llena de Mayo, 1944, es… retirar la energía de la voluntad-a-separación y agresión (una distorsión de energía de primer rayo) apartándola de las Fuerzas del Mal y canalizarla nuevamente, vía la Jerarquía; entonces demostrará como la Voluntad-al-Bien y esto se expresará vía los hombres de buena voluntad en la Tierra. Esto requiere un gran Acto de Absorción por la Jerarquía.
El Buda iniciará el proceso en el momento de Su aparición, mediante el uso de un gran mantra de primer rayo. Este puede ser usado sólo por alguien de Su categoría de iniciado y en colaboración con el Señor del Mundo. De ese modo Él desviará la fuerza de Shamballa que los Adeptos de la Logia Negra han soltado en las naciones del Eje; esto se ha posibilitado por ser receptivas a la voluntad-al-poder. Él la “acorralará” (si puedo usar un término tan coloquial e inapropiado) y la pondrá a disposición del Cristo. La recepción y la aceptación de esta energía de primer rayo requerirá un tremendo esfuerzo por parte del Cristo, el Custodio de la energía del segundo Rayo de Amor-Sabiduría. Para esta “recepción” Él comenzó a prepararse en el momento de la Luna Llena de Abril.
En otra parte les he dicho que este impacto directo de la energía de Shamballa sobre la humanidad ocurre muy rara vez. Ha sido lanzada sólo tres veces durante la historia entera del reino humano. En otros momentos, hace su impacto directamente sobre la Jerarquía, y es entonces trasmutada o reducida para que la humanidad pueda tomarla. Los tres momentos que ha sido dirigida, sin impedimentos y sin trasmutar, hacia la humanidad son:
- En el momento de la individualización del hombre-animal cuando se implantó el principio mente. Esta fue la hora de nacimiento del alma humana.
- En días atlantes cuando el poder de la Logia Negra era tan grande que la derrota estaba frente a la Jerarquía y la destrucción del alma humana. Shamballa entonces interfirió, y el mundo de ese tiempo fuedestruido. Este período es reconocido en la historia moderna como el tiempo del Gran Diluvio.
- Hoy, una vez más, los Poderes de la Oscuridad están tratando de destruir a la humanidad y los valores espirituales. El poder de Shamballa fue liberado, destruyendo viejas formas —políticas, sociales y religiosas— pero al mismo tiempo este poder fue aprovechado por las fuerzas malignas para destruir las almas de los hombres, precipitar la guerra y destruir las ciudades y todosnuestros centros de civilización y cultura. La primera fase o forma de destrucción fue dirigida por los discípulos, los aspirantes y la gente de claro pensar del mundo, y esto fue necesario y muy bueno. Las viejas formas sociales, políticas y religiosas estaban atontando el alma humana y obstaculizando todo progreso. La segunda fase o forma de destrucción fue dirigida por el mal y enfocada a través de esas naciones que habían sucumbido al glamur de superioridad, a la tentación de agresión material y a intolerantes odios raciales, implementados por crueldad y barbarie.
Ahora ha llegado el momento en que esta energía divina debe expresarse a través del segundo aspecto de la voluntad-al-bien, y no a través del primer aspecto, la voluntad-al-poder. Ha tenido que mostrarse al género humano que aún no está listo para el poder, porque la voluntad-al-bien no es adecuadamente fuerte para balancear este primer aspecto de la voluntad.
Extraído de: “La Exteriorización de la Jerarquía”, Alice Ann Bailey.
