Octubre de 1949
Cuando esté más avanzada la tarea de preparación de las mentes de los hombres, cuando el conocimiento de la existencia de los Maestros y Su empeño jerárquico y de la unida Jerarquía de nuestro planeta sea una verdad comúnmente reconocida, y cuando buena voluntad activa sea reconocida como un real acervo nacional en todos los países, entonces la velocidad de la exteriorización de la Jerarquía aumentará grandemente; luego los cinco centros espirituales comenzarán a tomar forma definida y también demandarán reconocimiento; se conocerán los grupos que allí trabajan, y además estarán en estrecho contacto entre sí. A partir de ese momento, la red de iniciados y discípulos bajo la dirección de los Maestros será mundial, y en todo campo de expresión humana la opinión de estos hombres y mujeres, y la de los Maestros que presiden los cinco centros y en Sus grupos afiliados, será considerada de inmenso valor por todas las organizaciones gubernamentales, económicas y sociales.
Entonces —bajo una gran ola de inspiración espiritual— el divino espíritu de expectativa por la reaparición del Cristo se extenderá por el mundo; entonces se la considerará creíble y digna de crédito, y Su venida proporcionará el germen de toda esperanza mundial; la razón de esto será que las personas más respetables, esclarecidas y cultas del planeta Lo estarán buscando. Y entonces, hermanos míos, Él vendrá, trayendo nuevas energías de amor y compasión, e implementando el espíritu de nuevo esclarecimiento; a estos importantes eventos debe añadirse la nueva revelación que todos los hombres esperan y a la cual serán capaces de responder, debido a la estimulación nueva y necesaria.
Muchos de los que están leyendo esta sección de mis instrucciones se decepcionarán (tan fútil y tonta es la mente humana en tantos casos) porque no elijo considerar ahora los medios por los cuales los Miembros de la Jerarquía Se ajustarán a las modernas condiciones de vida, qué alimento comerán y si se casarán o no se casarán. Una sola cosa diré: tomarán la vida moderna y lo que significa y procederán a demostrar cómo esa vida (el producto normal del proceso evolutivo) puede ser vivida divinamente; expresarán el ideal más elevado del matrimonio (aquí les recordaría que muchos de los Maestros están casados y han formado familias) y demostrarán el principio que subyace en la perpetuación de la raza de los hombres; Ellos también mostrarán cómo toda vida es una sola vida, que la naturaleza forma es siempre una unidad sacrificial en el vasto esquema de manifestación divina; además nos mostrarán que cualquier cosa que hagamos, sea que comamos o bebamos, todo debe hacerse bajo ley correcta, moderada y natural y en un espíritu de comprensión amorosa, y siempre para gloria de Dios. Expresarán vivir ordenado y moderado en todas las cosas, y demostrarán además la posibilidad de la existencia de personas en la tierra que no tengan inclinaciones erróneas ni malas cualidades en sus naturalezas. Se destacarán como ejemplos vivientes de buena voluntad, de verdadero amor, de inteligente sabiduría aplicada, de alta campechanía y alto buen humor, y de normalidad. En efecto pueden ser tan normales que el reconocimiento de lo que Ellos son puede pasar inadvertido.
Ellos, finalmente, demostrarán a todos a Su alrededor la significación del correcto motivo, la belleza del servicio altruista y una vívida percepción intelectual. Esta es, hermanos míos, una declaración tan trillada, desde el punto de vista de la persona bienintencionada y amable, que su valor quizás escape a la atención de ustedes. Sin embargo es una declaración que, cualquier iniciado les dirá, merece vuestra más detenida atención y consideración —una consideración que debe ser seguida por un esfuerzo para expresar estas mismas cualidades en vuestro camino hacia la Puerta de Iniciación.
El delineamiento más escueto debe ser suficiente aquí. En las páginas precedentes me ocupé algo extensamente del trabajo propuesto para los Ashramas exteriorizados y también en varios de mis otros libros, y no será posible una presentación más detallada en este momento. La exteriorización que se avecina ocasionará una estimulación incrementada que afectará necesariamente a discípulos y aspirantes e involucrará un período de ajuste a esta vibración superior. Ajuste a la vivencia incrementada será facilitado por la enunciación de ciertas declaraciones básicas para la guía de discípulos, aspirantes y personas de buena voluntad.
Específicamente, los Ashramas exteriorizados estarán activos en cuatro líneas mayores:
- Crear y vitalizar la nueva religión mundial.
- La reorganización gradual del orden social —un orden libre de opresión, la persecución de minorías, materialismo y orgullo.
- La inauguración pública del sistema de iniciación. Esto involucrará el crecimiento y la comprehensión del simbolismo.
- El entrenamiento exotérico de discípulos y de la humanidad en este nuevo ciclo.
Mientras tanto, ¿qué es lo que ustedes, hermanos míos, deben hacer en este período intermedio? ¿Cuál es el trabajo y la meta de ustedes? Permítanme enfatizar uno o dos puntos:
La meta material que todos los que aman a sus semejantes y sirven a la Jerarquía deben tener siempre en la mente y en el corazón, es la derrota del totalitarismo. No digo la derrota del comunismo, sino la derrota de ese proceso maligno que involucra la imposición de ideas, y que puede ser el método de las naciones democráticas y de las iglesias en todas partes, tanto como es el método de la U.R.S.S. A esto llamamos totalitarismo. Les pediría tener esta distinción con claridad en vuestras mentes. Vuestra meta material es la derrota de todo lo que infringe el libre albedrío humano y lo que mantiene a la humanidad en la ignorancia; esto aplica igualmente a cualquier sistema establecido —católico o protestante— que impone sus conceptos y su voluntad sobre sus adherentes. Totalitarismo es la base del mal hoy en día; se encuentra en todos los sistemas de gobierno, de educación; se encuentra en el hogar y en la comunidad. Aquí no me refiero a las leyes que hacen que las relaciones grupales sean sólidas, posibles y correctas; esas leyes son esenciales para el bienestar comunitario y nacional y no son de naturaleza totalitaria. Me refiero a la imposición de la voluntad de los pocos sobre la masa total del pueblo. La derrota de esta tendencia indeseable en todas partes es vuestra definida meta material.
La meta espiritual de ustedes es el establecimiento del Reino de Dios. Uno de los primeros pasos hacia esto es preparar las mentes de los hombres para aceptar el hecho de que la reaparición del Cristo es inminente. Ustedes deben decir a los hombres en todas partes que los Maestros y Sus grupos de discípulos están trabajando activamente para poner orden en el caos. Deben decirles que hay un Plan y que nada puede detener el cumplimiento de ese Plan. Deben decirles que la Jerarquía permanece y que ha permanecido durante miles de años, y es la expresión de la sabiduría acumulada de las edades. Deben decirles ante todo que Dios es amor, que la Jerarquía es amor y que el Cristo está viniendo porque Él ama a la humanidad.
Este es el mensaje que deben dar en este momento. Y con esta responsabilidad los dejo. Trabajen, hermanos míos.
Extraído de: “La Exteriorización de la Jerarquía”, Alice Ann Bailey.
